¿Te gustaría aprender a signar con tu bebé pero tienes dudas? ¡Las resolvemos!
¿Tienes a tu lado un bebé o niño pequeño que aún no habla y te encantaría saber qué piensa o qué pasa por su cabecita? ¿Vives momentos en los que se pone a llorar desconsoladamente y no logras dar con lo que le pasa para calmarle? A todos los padres nos ha pasado alguna vez, (sobre todo cuando somos primerizos), y en esos momentos desearíamos tener a nuestro lado una lámpara maravillosa frotarla y que apareciera un genio al que pedir nuestro deseo: ¡ojalá mi bebé pudiera hablar!
Hace un tiempo comenzábamos a hablar en el blog sobre maravilloso mundo del babysigning o comunicación temprana basada en signos, (si te lo perdiste puedes leerlo aquí), así como de todos los beneficios que reporta a la familia y las razones que puede animarte a aprender.
Hoy nos gustaría ir un poco más allá y responder a algunas de las dudas más comunes que se plantean padres y educadores a la hora de decidirse a aprender a signar son sus bebés.
- ¿Cuándo se puede empezar?
Algunas mamás tienen tantas ganas de aprender que incluso empieza a interesarse desde que están embarazadas. En realidad nunca es pronto ni tarde, ¡todo depende de las ganas que tengamos!
En mi experiencia como instructora he tenido como alumnos familias con bebés de apenas dos meses y otras con niños de más de dos años, pero si queremos pensar en una “edad ideal” podríamos decir que está entre los 6 y 12 meses. A partir de los seis meses cuando los bebés comienzan a estar preparados para sentarse y se produce el desarrollo de las habilidades motoras finas: se descubren sus manitas y poco a poco van siendo capaces de señalar cositas, hacer la pinza de los dedos pulgar e índice, sostener juguetes.. etc
Además, en esta época se fijan mucho en nosotros y les encanta imitarnos, (por ejemplo si damos palmas o les sacamos la lengua tratan de repetirlo), por tanto es una oportunidad excelente para aprovechar a enseñarles gestos sencillos para que pueda comunicarse.
Foto de Mulan cortesía de Flickr
- ¿Cuánto tardan en aprender?
Todo depende del momento en el que empecemos y lo constantes que seamos. Si empezamos cuando nuestro bebé tiene apenas dos meses tardaremos un poco más de tiempo en ver resultados porque no tiene el nivel de madurez suficiente para poder repetir el signo, aunque sí que puede ir interiorizando su significado. Sin embargo, si el bebé tiene ya 8, 10 o 12 meses el aprendizaje puede ser mucho más rápido. Además, también depende del nivel de exposición que el bebé tenga a los signos: no es lo mismo si le enseña sólo la mamá a si se involucra el papá y el resto de cuidadores, (por ejemplo los abuelos, la escuela infantil..)
Lo importante es no ponerse objetivos rígidos y acompañar con calma este aprendizaje maravilloso. A veces parece que los padres sentimos prisa por todo y siempre estamos pensando en cuándo el bebé comenzará a comer sólidos, a gatear, a caminar.. Comparamos con otros y se nos olvida maravillarnos del día a día y de cada logro de nuestro bebé, todo pasa muy rápido y es necesario disfrutar de cada momento.
Si tenemos constancia debemos confiar en que todos los bebés aprenderán a signar, no importa que tarden 15 días, 2 meses o 6. Cuando hagan su primer signo sentiremos una emoción increíble y a partir de ahí viviremos una experiencia fascinante junto a ellos.
- ¿Cómo es la lengua que se enseña a signar a los bebés?
Es muy similar al lenguaje de señas de la comunidad no oyente, con gestos sencillos adaptados a las capacidades motoras de los bebés.
En realidad, los bebés hacen sus propios gestos de forma innata, por ejemplo, cuando tienen hambre hacen el gesto de succión, cuando tienen sueño se rascan los ojitos, cuando quieren que les cojamos levantan los bracitos..
Podemos crear nuestros propios gestos que sirvan como herramienta de comunicación en la familia, pero lo más sencillo es basarnos en una lengua de signos de las que ya existen en el mundo. La más extendida en el babysigning es la basada en lengua de signos americana, (ASL, American Signs Language), ya que el origen de la técnica viene de EEUU y su lengua de signos tiene muchos hablantes en el mundo, (se estiman más de dos millones de hablantes en el mundo, siendo algunos países Canadá, República Dominicana, Costa Rica, Salvador, Haití, Puerto Rico, algunas partes de México, Filipinas, Malasia, Singapur, Hong Kong, Costa de Marfil, Mauritania, Kenia, Madagascar y Zimbabue).
Sobre este punto tenemos que pensar que la lengua que elijamos será sólo un vehículo de comunicación con nuestro bebé durante unos meses maravillosos. Si nuestro objetivo fuera comunicarnos con una persona no oyente de nuestra familia, nos interesaría aprender la lengua de signos de nuestro país, pero si lo que queremos es desarrollar la comunicación temprana y reforzar el vínculo afectivo con nuestro bebé podemos elegir la lengua más sencilla y con la que nos sintamos más cómodos.
El hecho de elegir la americana nos sirve para fomentar el bilingüismo, ¡y ya sabemos que los primeros años son una oportunidad excelente para aprender lenguas de forma innata!
Como ejemplo puedes ver este vídeo de Rachel Coleman de Signing Time en el que vemos a los bebés disfrutar del “baile del pañal”. La experiencia es realmente divertida y una vez que los bebés comienzan a signar todos los padres se preguntan cómo es que no lo habían descubierto antes.
Si te apetece aprender ahora tienes la oportunidad, en breve comienza el curso “21 días aprendiendo signos”, que está pensado para familias con poco tiempo que lo puedan hacer en línea desde la tranquilidad de su hogar y a su propio ritmo, con un grupo privado de seguimiento durante tres fantásticas semanas con las que ir aprendiendo junto a los bebés.
¿Te animas? Click en la imagen para mayor información del curso:
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Un abrazo,
Miriam Escacena, ingeniera de profesión pero por encima de todo mamá de corazón. Su maternidad supuso un antes y un después en su en su vida, revolucionado sus prioridades y queriendo disfrutar al máximo de la experiencia para crecer como persona y sacar lo mejor de sí misma día tras día. Presidenta y fundadora de la asociación de crianza “Entre Nubes”, instructora de lengua de signos para bebés, instructora de porteo, formadora de La Pedagogía Blanca y Educadora de Masaje Infantil.
http://www.comunicacionconbebes.com/
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