El temido día llegó. La licencia por maternidad se terminó junto con las vacaciones de verano y me vi en la obligación de dejar a mi hija al cuidado de mi esposo mientras yo me convertí en madre trabajadora.
Fue un día extraño, como ya les he contado trabajo en un pueblo cerca de la ciudad donde vivo y tengo que viajar 40 minutos de ida y otros de vuelta diariamente, por lo que, si mi jornada normalmente es de 4:30 hrs se extiende a 6:30 hrs con todo y viaje.
Lunes y martes, mi esposo me acompañó al pueblo y se encargó de cuidar a la niña cerca de donde yo estaba, así si había algún llanto inconsolable podría acudir en su auxilio. Pasaron las horas y la iba a ver a menudo, a darle de comer, a sentirla cerquita… pero el miércoles me fui totalmente sola, esto, aunado a que también por primera vez manejaba sola en carretera, fueron muchos sentimientos encontrados.
No lo voy a negar, el estar separada de la bebé como madre trabajadora por unas horas me da un sentimiento de libertad que disfruto a veces, pero después me siento culpable de no sentirme culpable de dejar a la bebé. Espero no me mailterpreten, deseo estar con ella, ojalá pudiera estar conmigo en el trabajo! pero el estar sola, seguir siendo yo sin ser la “mamá de…” me da una sensación de poder de lo más deliciosa.
Por unos segundos vuelvo a ser la maestra de siempre, platicando con compañeros, sin preocuparme por si puedo o no ir al baño en ese momento, pero por otros me entra la nostalgia, quisiera tener a mi hija todo el tiempo conmigo.
No se preocupen, la tengo bien presente y más cuando mis pechos se ponen duros como piedras a final de la jornada (por qué nadie me dijo que me llevara el sacaleches a la escuela?) y sigo con mi meta de encontrar la forma de trabajar 100% desde casa, luego les contaré, para seguir siendo madre trabajadora, pero estar cerquita de ella.
Pero la verdad es que he sobrevivido a esta primer semana bastante bien, con mucho sueño, cansancio, pero plena. Me siento fuerte de poder hasta ahora ser madre y trabajar en lo que me apasiona. Aunque pasan los días y siento que me pierdo de cosas, será que me está entrando remordimiento?
¿Ustedes cómo llevan lo de ser madres trabajadoras?
¿Te gustaría quedarte en casa?
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Multitasking de nacimiento, busca encontrar el equilibrio entre la vida profesional y el hogar y cree que un mundo mejor es posible, si se empieza desde casa.
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Debe de ser muy difícil dejar a tu bebé con tan pocas semanas de nacida, aunque tienes el súper consuelo de que quien la cuida es su papá, ¡qué fortuna!
Yo dejé el trabajo desde mi primer embarazo, no me gustaba la idea de dejar a mi pequeño en la guardería con tan pocos días de vida. Disfruto la “tranquilidad” que me da el poder quedarme en casa, aunque hay días en los que extrañó trabajar en oficina.
Ojalá que pronto puedas encontrar desde casa.
Saludos!
No es fácil… una siente un dolor en el cuerpo, en el alma…. pero está bueno… éxitos en esta nueva etapa!!!!
Al ver el título sabía que eras tu quien compartía este hermoso y difícil tema. Muchos ánimos para seguir tan bien y disfruta de esos momentos en que vuelves a ser tú, hazlo sin culpa y disfruta al máximo cuando la tienes en los brazos una vez más. El secreto es que tu te sientas bien con lo que haces y fuera culpas.
Abrazo, Susana
Muchas gracias por tus palabras Susana!
Gracias Paola! poco a poco se va superando