En la actualidad, las mamás estamos buscando siempre formas de apoyar el desarrollo de nuestros hijos, lo que nos ha llevado a tener casas llenas de juguetes, videos y muchas cosas. Lo hacemos con buena intención, pero a veces podemos sobreestimular a los niños, lo cual nos generará problemas más adelante.
Un niño debe tener estímulos para aprender, es cierto, la falta de esta puede ocasionar retrasos en el desarrollo e incluso discapacidad intelectual, pero como en todo, la moderación es lo más importante.
Catherine L’Ecuyer ha estudiado por años las neurociencias y en su investigación descubrió que cuando sometemos a los niños a largos periodos de tiempo frente al televisor, videojuegos o tenemos su habitación llena de juguetes, éstos empiezan a perder su capacidad de asombro y la motivación por aprender. Pues, en vez de aprender de “adentro hacia fuera” quieren que los entretengamos de “afuera hacia adentro”.
(El artículo completo fue escrito originalmente para Disney Babble)
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